
Los pacientes diabéticos sufren de problemas para metabolizar el azúcar. Los niveles de azúcar en la sangre pueden aumentar cuando el cuerpo no es sensible a la insulina. El té verde puede curar la diabetes y mejorar sus síntomas, aumentando la sensibilidad del cuerpo a la insulina y ayudando en la función del sistema metabólico.
Según un estudio de 2013 publicado en el Diario de Diabetes y Metabolismo, beber té verde puede ayudar a prevenir la obesidad, que es una de las causas de la diabetes. Un estudio japonés demostró que beber 6 tazas de té verde por día redujo el riesgo de diabetes tipo 2 en un 33 por ciento.
El té verde contiene polifenoles, sustancias beneficiosas que pueden reducir el estrés oxidativo, reducir la presión arterial, reducir el colesterol y prevenir la coagulación. Todas estas habilidades reducen el riesgo de desarrollar enfermedad cardiaca, que es una de las complicaciones de la diabetes mellitus. Los polifenoles, que se encuentran abundantes en el té verde son eficaces en la gestión de la glucosa en el cuerpo, con lo que promueven la prevención y el tratamiento de la diabetes mellitus.
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